domingo, 1 de noviembre de 2009

Sin excusas




No habrá excusas esta vez.
Sé que las abejas están zumbando en tu oído
prometiendo un domingo desarmado
de fusiles y traidoras mordidas.
Consulto mi oráculo frenético
y todo parece indicar que hoy es el día:
Un domingo desarmado
por la lujuria de mis veintiocho años.
Hoy, no habrá pie para las excusas
ni treguas de aullidos.
Hoy, es el día para conjurar
un húmedo tango
y liquidar los sexos con lunáticas fragancias.
Hoy, es el día para ordenar tu piel
envuelta en sábanas de plata,
para que entres en mis sueños
y me supliques por realizar
tus más recónditos deseos.
No habrá excusas para que hoy
te enredes en la selva de mi pelo
y te pierdas en la insolencia
que guardan mis piernas.
Hoy, es domingo desarmado,
domingo amado,
mordido,
blasfemado.
Es el día para invadir tu hogar
y ser esa niña terrible que te prometí.


LinkWithin

Related Posts with Thumbnails