sábado, 20 de octubre de 2012

UN SUEÑO

"Aprendí a buscarte, nada más
sin saber que estabas
tan adentro mío y más allá
de todo y de nada."



Un ramito de flores violáceas
para recibirte en mi cuerpo.
Abro la boca sólo para apaciguar
tus deseos de hombre estratega,
capitán  y navegante
cuyo único norte es la luz de luna.
En ese sueño, en esa vida
partes prófugo del silencio.
Partes y te pierdes,
te proteges
en el inmenso atlántico,
mi Ulises naufrago.

Nunca supe cómo retenerte,
nunca supe cómo estrechar los brazos
y  mis palabras alrededor de tu corazón
y  siempre terminas yéndote
en los sueños y en las vidas.

Pero, en ésta te me apareces en visiones
y  en ellas veo tus ojos, siento tus manos
y aún me haces estremecer de miedo,
de ganas de más momentos,
de echarle un vistazo al futuro,
junto a ti, junto a ti.

Quiero hacerme océano en tus ojos,
quiero soñar todos los sueños,
vivir juntas todas las vidas
para tenerte en esta y esperarte,
como siempre,
con un ramito de flores violáceas
y hacernos amor de distancia y de re-encuentros
en el alma y en el cuerpo.


Quiero seguir en este sueño,
tener la boca y los ojos bien cerrados
y  sólo sentirte en el centro de mi pecho
como dolor de estaca madura  permanente
y de saberte ajeno cuando muera
o cuando despierte.






No hay comentarios:

Publicar un comentario

LinkWithin

Related Posts with Thumbnails